La Universidad de Valencia ha realizado un estudio sobre la calidad de los zumos de naranja exprimida por máquinas que se sirven en los bares y cafeterias con el resultado de que en un 43% se superan los límites de enterobacterias y en un 12% el límite de microorganismos aeróbicos mesófilos establecidos por ley.
Se supone que estas irregularidades son debidas a la falta de limpieza del interior de las máquinas y el tiempo que el zumo queda en el vaso receptor antes de ser consumido.
Fte: Europa Press